Según la OMS, el 23% del total de accidentes de tránsito graves tienen que ver con vehículos pesados. Entre las causas se encuentran la impericia, el cansancio y los puntos ciegos.
Los puntos ciegos son las limitantes que un conductor puede llegar a tener dentro de su campo de visión y el peligro aumenta para otros.
De por sí, todos los automóviles y transportes tienen puntos ciegos y esto se debe a que los retrovisores no siempre cubren todo el espacio necesario. Además, mientras el vehículo sea más grande los conductores pueden llegar a tener más problemas.
En el caso de los camiones, al tener un capó más largo y grande, el campo de visibilidad disminuye al frente. En los laterales también hay problemas, ya que la visión está limitada por los retrovisores; por lo tanto, los giros a la derecha son de gran peligro y es complicado observar a los automóviles. Por último, tenemos la parte trasera que es un punto ciego largo y debemos tener cuidado cuando retrocedemos y mantener una distancia de los demás.
Cómo evitarlos
- Evita ante todo girar la cabeza para regresar a ver, ahí es cuando se descuida el frente y el campo visual.
- Mantén tu carril derecho para que puedas adelantar por la izquierda cuando sea necesario. Adelantar por el carril derecho es una maniobra imprudente y puede llegar a poner a otros en riesgo, en especial los motociclistas.
- Ubica los retrovisores dentro de un ángulo que permita ver los costados de tu vehículo. Así, podrás observar la distancia de los otros automóviles.
- Evita cualquier cosa que obstruya la vista. No ubiques ningún objeto en el tablero o en el vidrio panorámico. Por más pequeño que sea, estos pueden estorbar tu visión.
- Mantén siempre la distancia con los vehículos que tengas al frente.Y recuerda, conduce con cuidado.